La pregunta es: ¿quiere Cristina que el peronismo triunfe en las
elecciones de 2015 o prefiere que el vencedor sea Mauricio Macri o Sergio
Massa?
La respuesta podríamos encontrarla en que la Presidenta y sus
seguidores preferirían que ningún peronista Kirchnerista pueda convertirse en
un líder que opaque a Cristina como referencia ineludible.
La historia deja lecciones: Menem prefirió que Duhalde fuera derrotado
en 1999 para poder intentar regresar él al poder tiempo después. Lo intentó en
2003, pero la paliza que auguraba la segunda vuelta electoral lo hizo desertar.
Mientras que Duhalde apostó por Néstor Kirchner y éste ni bien accedió al Poder
lo erosionó de tal forma que Duhalde nunca más se pudo recuperar, Néstor le
socavó todo el poder tanto desde adentro como afuera del Peronismo, de esto el
Kirchnerismo sabe mucho y por supuesto tienen en claro que no quieren que les
pase lo mismo a ellos, es decir Cristina no quiere convertirse en el nuevo
Duhalde.
A los jefes del peronismo territorial (gobernadores, Intendentes, etc.) esto
no les causa ninguna gracia, porque el año que viene se renuevan gobernaciones
e intendencias, además de la Presidencia. Eso quiere decir que la carne de
todos ellos va a estar en la parrilla.
Ninguno quiere ser el héroe que
se hunda con su barco y su bandera. Todos quieren llegar a la otra orilla y
retener cuanto menos el pedazo de poder que hoy tienen, es que de eso siempre
se trató el Peronismo, llegar y mantenerse en el Poder de cualquier forma.
Pueden ser, según la circunstancia, leales a una idea o a un liderazgo, pero sobre
todo son leales a ellos mismos, como siempre. O como también se dice desde
adentro del Peronismo que: “acompañan solo hasta la puerta del cementerio”.
Algunos aseguran que jugarán la
lógica kirchnerista hasta el final a menos que les convenga otra cosa, total en
el Peronismo siempre hay tiempo para volver, siempre y cuando se tenga alguna
cuota de poder.
Necesitan conservar fuerza propia utilizando a fondo al Estado como
partido político, como lo están haciendo ahora, intervenir en la confección de
las listas de candidatos para que la mayor cantidad de “leales” puedan acceder
a cargos electivos y, simultáneamente, estimular las ambiciones de todos
aquellos que quieran anotarse en la carrera hacia la Casa Rosada. La
estrategia oficial precisa que el PJ no se reactive mucho y que haya varios
precandidatos.
En
esta lógica kirchnerista, la clave puede estar en Macri o Massa, sabemos que el
próximo Gobierno tendrá serios problemas para Gobernar, el Kirchnerismo,
lamentablemente para todos los argentinos, fiel al estilo Peronista, dejará “tierra
arrasada”, dejará un País en llamas, con problemas en todas las
carteras. De esta forma apostará nuestra Presidenta a un regreso “Triunfal”
dentro de cuatro años o “antes”, como les gusta a ellos.
¿Porque
Macri o Massa?, Macri sería para ellos el más propenso al fracaso estrepitoso,
sin base propia en la mayoría de las Provincias que le garantice la
gobernabilidad en el país. Por otra parte Massa les garantizaría un éxito
rotundo, en la misma lógica que con Macri ante el fracaso les abriría la puerta
para volver como ya dijimos, pero con un aditamento extra y es que todo el
Massismo no es ni mas ni menos que “Kirchnerismo converso”, desde el propio
Massa hasta el último de los Concejales del Frente Renovador fueron hasta hace
menos de un año Peronistas Kirchneristas que de pronto “vieron la Luz ” y se dieron cuenta de
todo lo malo que era el Kirchnerismo, y esto también les garantiza que ante un
pronto regreso de nuestra Presidenta al gobierno producto del fracaso de Massa,
tendría desde adentro del propio Gobierno como así también en ambas Cámaras y
en los distintos estratos de Gobierno tanto Provincial como Municipal “nuevos
adeptos”, ya que fácilmente se podría “convertir” a un Converso.
Está
claro, el mejor escenario para el Kirchnerismo es que el Frente para la Victoria pierda en el
2015, abra que ver como cae esto entre los Gobernadores e Intendentes, de todas
formas en el último minuto se acomodarán para seguir sobreviviendo y viviendo
del Poder, de eso el Peronismo sabe y mucho.
Pablo Eduardo
Vázquez