En los últimos años hemos sido testigos de cómo al gobierno de la Familia Kirchner le gusta renombrar y rebautizar ciertos conceptos o términos, ahora se suma una nueva acepción al diccionario K, comenzó la era de la “Sintonía fina” en nuestro País.
Después de conocer las primeras medidas del gobierno nacional para el año 2012 entre las cuales se destacan las quitas de subsidios en los servicios de luz, gas, agua y transporte, traspasos de distintos tipos de servicios a las provincias como es el caso del subte a la Ciudad de Buenos Aires, revisión de los sueldos de mas de 300.000 empleados públicos, Gobernadores K pasando a disponibilidad a empleados de sus Provincias, restricciones a la compra de dólares, exigir a los gremios que en las próximas paritarias pronto a abrirse no negocien por encima de un 18% de aumento en los salarios cuando ya todos sabemos que el clima inflacionario que vivimos nos hace aventurar un índice muy superior a ese 18% para este año.
También es notorio para nosotros otras medidas que se tomaron desde el gobierno a través de la inacción del mismo, es decir, medidas que no se tomaron y deberían aplicarse pero es clara y manifiesta la intención de no hacerlo como son el bono de fin de año que los jubilados han percibido durante toda la era K y que en diciembre de 2011 no fue así (que las elecciones hayan sido con anterioridad suponemos que es solo una mera casualidad de índole de calendario).
Tampoco el gobierno ha actualizado los montos con los cuales se calcula y obtiene el salario familiar de acuerdo a la inflación dejando de esta manera a muchos trabajadores afuera de este beneficio y a otros muchos percibiendo por debajo de lo que deberían percibir ahorrándose el gobierno una suma grosera y cuantiosa que debiera estar en manos del pueblo trabajador. Tampoco se han actualizado los montos de la Asignación universal, estos ingresos, dinero que rápidamente sería puesto en la rueda del mercado interno y que al no percibirse es dinero que falta y faltará en el circuito de consumo.
Todo esto que acabamos de señalar son algunas de las medidas anunciadas para este año, cabe señalar que en cualquier país del mundo y en cualquier gobierno en toda la historia este paquete de medidas fue, es y sería llamado claramente AJUSTE, pero no para este Gobierno, que acaba de bautizar a este plan de medidas “Sintonía Fina”.
Lo que es mas grave aún no es que un gobierno tenga que re direccionar su política económica después de un mal desempeño, una mala gestión o un mal y excesivo gasto de los fondos públicos. Lo que es grave es que las cuentas no cierran, el déficit del 2011 ha sido exagerado y grosero en un país que está batiendo mes a mes todos los records de recaudación en su historia.
Es mas grave aún porque no se reconoce que aquí hay serios desmanejos en el uso de la caja pública con gastos inadecuados y fuertes denuncias de actos prebendarios y de corrupción.
Aún lo peor está por venir ya que estas políticas de ajuste a implementar no son mas que viejas recetas utilizadas muchas veces en el pasado y con muy malos resultados, aquí está claro que no hay programa, no hay plan y como el desmanejo, la fiesta, las dadivas y el mal uso de los fondos públicos ha generado un déficit cuantioso en el 2011 para asegurar la relección K, ahora hay que ajustar de cualquier forma, no caben dudas esto es un ajuste clásico del gasto público sin muchas luces con una incidencia que será directa tanto en el salario como en el empleo y el mercado interno de consumo desacelerando la economía interna de nuestro país.
Está claro que de la mano de este ajuste habrá un inevitable enfriamiento de la economía. Por cada peso que un trabajador deje de percibir o tenga que destinar al pago de impuestos y servicios, es dinero que se escapará del consumo.
Este ajuste está dirigido claramente al trabajador y a toda la clase media de nuestro país, una muestra mas de un gobierno que se dice popular, que se dice estar en favor de los trabajadores pero que gobierna para las grandes corporaciones nacionales e internacionales que beneficia cotidianamente y no aparecen en la publicidad oficial, esa publicidad oficial que hace referencia cotidianamente a la igualdad, la equidad y la defensa de los derechos sociales que con este gobierno poco tienen que ver con la verdad.
Pablo Eduardo Vázquez
09/02/2012
